BUCEANDO PARA CONSERVAR LOS CORALES: CHICHIRIVICHE PUNTO DE ESPERANZA


Hace algunas semanas tuvimos la agradable sorpresa de conocer una noticia que de seguro alegra, emociona y enorgullece a todos los que hemos hecho del Buceo nuestro estilo de vida, que oportunamente compartirmos en nuestras sección de NOTICIAS Y PUBLICACIONES DESTACAS, y que hoy queremos llevar más directamente a nuestros lectores como reconocimiento y muestra de admiración y respeto hacia nuestra colega y gran amiga personal Gabriela Chirinos.
Chichiriviche de La Costa
Panorámica Bahía Chichiriviche

Como muchos del medio submarino saben, la Bahía de Chichiriviche de La Costa, en el Estado Vargas, es uno de los secretos mejores guardados de nuestras costas venezolanas, posee un rió proveniente de las montañas de la zona que desemboca en ella y que junto con otros factores ambientales, en ocasiones afectan considerablemente las condiciones que normalmente se observan en sus tranquilas y cristalinas aguas.
La Bahía cuenta con unos cientos de habitantes, quienes viven desde la parte baja de las montañas y hasta la orilla de la playa, su sustento e ingresos proviene directamente de la pesca artesanal y el turismo local. 
Bajo sus azules y transparentes aguas encontrares formaciones de arrecifes de coral a ambos lados de la bahía, acompañados de una enorme diversidad biológica. Los practicantes de las actividades subacuáticas puedes avistar con facilidad una gran variedad de vida marina, como peces murciélago o peces rana, que son especies poco comunes en otros lugares, también es común encontrar caballitos de mar, nudibranquios, pepinos de mar, estrellas de mar, anémonas, tunicados, erizos de mar, diferentes especies de moluscos bivalvos, crustáceos, esponjas y medusas, estas últimas atraen Tortugas Carey que son vistas con frecuencia por los Buzos. También es frecuente, en ciertas épocas del año, el avistamiento y encuentro con cetáceos y tiburones ballena.
El Buceo y otras prácticas subacuáticas son protagonistas de la mayoría de la actividad turística en la bahía, y para los amantes del mar el atractivo de sus costas es la riqueza de sus ecosistemas marinos, aunado al fácil acceso a sus aguas desde la orilla.
Sin embargo, el desconocimiento de la importancia de la conservación de los ambientes marino-costeros y su preservación en el mejor estado posible, por parte de los temporadistas, turistas que vacacionan en la zona y hasta de los lugareños, suele tener como resultado, negligencia y contaminación, ya que la mayoría de ellos desconocen el impacto que tienen sus actividades en las playas y en general en todo el ecosistema.
Los Buzos somos personas muy apasionadas por la flora y fauna marina y los que suelen frecuentar Chichiriviche ocasionalmente trabajan con la comunidad para ser guardianes del ecosistema. Sin embargo, tal y como mencionamos en nuestra publicación anterior, la falta de experiencia o descuido de algunos buzos pueden ser motivo de un control inadecuado de la flotabilidad contribuyendo al deterioro de las comunidades coralinas presentes en la zona.
La Gran Noticia y sus Protagonistas
Foto de Equipo BIOSub

BIOSub es un grupo de la Universidad Central de Venezuela (UCV) en el que estudiantes conjugan la ciencia marina y la conservación con el ejercicio de distintas actividades subacuáticas (buceo en SCUBA, apnea, pesca submarina) y el apoyo a proyectos de investigación. BIOSub en colaboración con CECOBIO, otro grupo de extensión de la Facultad de Ciencias de la UCV, actualmente están diseñando un proyecto que aspira mejorar el estado de conservación y la valoración del ecosistema coralino de Chichiriviche. 
Rubén Niño es un estudiante de Biología en la UCV y quedó cautivado por los corales mientras practicaba apnea. Su trabajo en una de las operadoras de buceo de Chichiriviche le ha permitido tener una perspectiva única de los ecosistemas coralinos y su relación con las actividades locales en tierra firme. Una de sus metas es diseñar métodos sustentables de pesquería, mientras se educa a los lugareños, buceadores y turistas para que tengan una mayor consciencia ambiental y a la larga se preocupen por estos ecosistemas. Él señala:
“Muchos buzos experimentados dicen que la población de corales de Chichiriviche ha disminuido dramáticamente en el tiempo debido tanto a condiciones ambientales como a la pesca y el buceo irresponsable. Si no actuamos ahora, todos esos hermosos puntos de buceo desaparecerán en un futuro próximo, pero aún tenemos tiempo. La educación es la clave para la conservación.”
Imagen: Jose Antonio Paez
Marco Caputo, un biólogo marino, ha unido esfuerzos con Gabriela Chirinos, una conservacionista de Chichiriviche (quien ha realizado un importante trabajo de documentación sobre la existencia y desarrollo de ejemplares de Acropora palmata en la Bahía, una especie de coral pétreo en peligro crítico de extinción por el impacto del incremento de la temperatura de las aguas y la contaminación, principalmente por la descarga del río al mar), para educar a los habitantes sobre el Punto de Esperanza. Ambos expertos han sostenido unas interesantes conversaciones sobre su colaboración con Mission Blueel exitoso proyecto de tortugas marinas en Choroní y arrecifes coralinos.
La realización de un encuentro en una de las operadoras de buceo llamó la atención de más de 30 personas incluyendo miembros de la Guardia Nacional. Como resultado se visualizaron planes para que los lugareños se involucren con su Punto de Esperanza mientras se estrechan los lazos con la comunidad de buceadores.
BIOSub, en particular, adelanta esfuerzos en investigación de corales y algas, limpieza de playas, entrenamiento deportivo y educación a los lugareños sobre el buceo. Muy buenos planes están en perspectiva con la colaboración de un representante de Reef Check para entrenar próximamente a un grupo de buceadores para el monitoreo de arrecifes coralinos mediante recolección de datos y encuestas.
Gregg Magrane, uno de los promotores del Punto de Esperanza de Chichiriviche dice:

“La conservación es una estrategia para la sustentabilidad y la justicia generacional, para dar un sentido de equidad a las futuras generaciones. En nuestros esfuerzos de conservación, estamos en el proceso de incrementar la consciencia del turista, el buzo, el pescador y el lugareño. Sentimos que haciendo que todos sean conscientes es la mejor manera para asegurar que el ambiente no será destruido. Nuestras nominaciones para Puntos de Esperanza nos han dado bases firmes para avanzar con estos ideales y preservar un ecosistema marino en buenas condiciones para Choroní y Chuao y Chichiriviche de La Costa.”

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